El cuervo y el zorro
En la rama de un árbol, bien ufano y contento,
con un queso en el pico estaba un señor cuervo.
Del olor atraído un zorro muy maestro,
le dijo estas palabras o poco más o menos:
-Tenga usted buenos días, señor cuervo, mi dueño;
vaya que estáis donoso, mono, lindo en extremo;
yo no gasto lisonjas, y digo lo que siento:
que si a tu bella traza corresponde el gorjeo,
juro a la diosa Ceres, siendo testigo el cielo,
que tú serás el Fénix de sus vastos imperios.
Al oír un discurso tan dulce y halagüeño,
de vanidad llevado quiso cantar el cuervo;
abrió su negro pico, dejó caer el queso;
el muy astuto zorro, después de haberlo preso
le dijo: -Señor bobo, pues sin otro alimento
quedáis con alabanzas tan hinchado y repleto,
digerid las lisonjas mientras digiero el queso.
con un queso en el pico estaba un señor cuervo.
Del olor atraído un zorro muy maestro,
le dijo estas palabras o poco más o menos:
-Tenga usted buenos días, señor cuervo, mi dueño;
vaya que estáis donoso, mono, lindo en extremo;
yo no gasto lisonjas, y digo lo que siento:
que si a tu bella traza corresponde el gorjeo,
juro a la diosa Ceres, siendo testigo el cielo,
que tú serás el Fénix de sus vastos imperios.
Al oír un discurso tan dulce y halagüeño,
de vanidad llevado quiso cantar el cuervo;
abrió su negro pico, dejó caer el queso;
el muy astuto zorro, después de haberlo preso
le dijo: -Señor bobo, pues sin otro alimento
quedáis con alabanzas tan hinchado y repleto,
digerid las lisonjas mientras digiero el queso.
Quien oye aduladores nunca espere otro premio
Última actualización, Ene2025 | +3.172👀SOBRE ESTA BITÁCORA
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Como te di la vara con lo de los comentarios... Allá vamos...
ResponderEliminarEn primer lugar, me parece que has agrupado, a partir del quinto, los versos de la fábula. El alejandrino, que yo recuerde, no se usaba en la España dieciochesca.
Esta fábula es uno de los textos más acertados contra la adulación. Pero... (siempre hay un pero), olvidamos el punto de partida: el adulado ha hurtado el queso. La adulación no se da sólo entre trepas y ladrones, aunque su efecto pueda ser parecido. En todo caso, no todos los cuervos son tan bobos.
Tú eres el maestro. Y no es adulación gratuíta. Sabes cómo aprecio tu lectura, lo que nos obliga a revisar de nuevo el contenido.
ResponderEliminarAunque las he visto colgadas en otros blogs, no he hallado la moraleja que viene en mi libro.
Y lo curioso es que han despertado interés porque el blog ha recibido muchas visitas estos días.