Encuentro inesperado
Hace algo más de cincuenta años (hacia 1800) que, en el pueblo de Falun, en Suecia, dio un joven minero un beso a su linda novia, diciéndole: "El día de Santa Lucía bendecirá el cura nuestro amor, y seremos marido y mujer, y nos edificaremos un nidito."
"Y en él morarán la paz y el amor -repuso la hermosa novia con graciosa sonrisa-, pues tú eres mi único y mi todo, ¡y sin ti me fuera la vida tan enojosa!".

Mas cuando unos pocos días antes de Santa Lucía los hubo proclamado el párroco por segunda vez, dio la muerte un aldabonazo a la puerta de uno de estos venturosos amantes. Cuando a la mañana siguiente pasó el joven minero por delante de la cabaña de su querida, llamó a su ventana y le dio los buenos días, mas no volvió a darle las buenas tardes, pues nunca más volvió de la mina, y en vano estuvo ella haciendo un dobladillo aquella misma mañana, a una corbata negra que quería regalarle el día de la boda; pero como el novio nunca acababa de llegar, puso la triste corbata a un lado, lloró su muerte y no le olvidó jamás.
Entretanto, destruyó un temblor de tierra la gran ciudad de Lisboa en Portugal, y pasó la guerra de los siete años, y murió el Emperador Francisco I, y quedó disuelta la Orden de los Jesuítas y partida la Polonia, y murió la emperatriz María Teresa, y fue ajusticiado Struensee, el privado del rey de Dinamarca; la América inglesa conquistó su independencia, y las fuerzas unidas de España y Francia no pudieron recobrar la plaza de Gibraltar.
Los Turcos encerraron al general Stein en la cueva de los Veteranos, en Hungría, y murió también el emperador José; Gustavo, rey de Suecia, invadió la Finlandia rusa, y empezó la Revolución Francesa y la larga guerra, y el emperador Leopoldo II bajó también al sepulcro. Napoleón invadió la Prusia, y los ingleses bombardearon la ciudad de Copenhague, y los campesinos seguían sembrando y segando. Los molineros molían, y los herreros forjaban, y los mineros cavaban la tierra en busca de venas metálicas en sus talleres subterráneos.
Mas al tratar los mineros de Falun, en el año 1809, pocos días antes o después de San Juan, de abrir un hoyo entre dos capas a más de trescientas varas de profundidad, sacaron de los escombros y del agua saturada de sulfato de hierro, el cadáver de un mancebo, enteramente penetrado de la misma sal, pero, fuera de esto, incorrupto y sin la menos alteración;L y tanto, que todavía podían reconocerse sus facciones y edad, como si hubiese muerto en aquel mismo instante, o como si se hubiese echado a sestear en medio de su faena. Mas cuando le hubieron sacado de la mina, nadie conoció al mancebo dormido, ni supo nada de su desgracia (pues sus padres, amigos y conocidos habían muerto hacia mucho tiempo), hasta que se presentó la que había sido novia del minero, que allá, en días muy lejanos, se había metido en la mina y no había vuelto a subir. Toda cana y encogida, llegó aquella caduca mujer al sitio, apoyando su encorvado cuerpo en una muleta y reconoció a su novio; y con gozosa, antes que con dolorosa sorpresa, se dejó caer sobre el cadáver: "Es mi novio, a quien he estado llorando durante cincuenta años, y que Dios me deja ver finalmente antes de morir. Ocho días antes de las bodas, bajó mi querido a la mina, y nunca volvió."
Estas palabras arrancaron lágrimas a los circunstantes, que estaban viendo a la novia en edad caduca, y al novio en toda su juvenil hermosura, pero él no abría la boca para sonreirle ni los ojos para reconocerla. Finalmente mandó ella a los mineros que lo llevasen a su cabaña, como cosa que era suya exclusivamente, hasta que le hubiesen dispuesto un sepulcro en el cementerio. Al día siguiente cuando fueron a buscarle los mineros para llevarle al camposanto, abrió ella una arquita, sacó una corbata negra, se la puso a él al cuello, y echó a andar trabajosamente a su lado, vestida de fiesta, cual si fuera un día de bodas y no de entierro; en seguida, cuando le hubieron bajado al hoyo, dijo:
"Haz por dormir bien un día más o diez a lo sumo en el fresco tálamo, y no te impacientes, pues poco es lo que me queda por hacer, y pronto vuelvo, y amanecerá luego... Lo que una vez ha restituido la tierra, no lo guardará por segunda vez", dijo en el acto de marcharse y de volverse a mirar a su novio.
Última actualización: Feb2025 | 263👀
Miguel Guitar y Buch
La Abeja
Revista Científica y Literaria Ilustrada
Barcelona, 1862
Escaneada por el Ministerio de Cultura en 2006
Imagen vista en "La Crónica de León"
SOBRE ESTA BITÁCORA

Esta bitácora nace en noviembre de 2008 con el ánimo de divulgar historias curiosas y entretenidas. Son 17 años acudiendo diariamente a la llamada de amigos que vienen de todo el mundo. Con +6.709.000 visitas, un mapa del románico abierto a finales de 2023 que ya ha recibido +805.500 consultas y +6.100 artículos en nuestra hemeroteca, iniciamos una nueva andadura. Comparta, Comente, síganos por nuestros canales de Telegram y Wasap. Y disfrute. ¡Es gratis!
0 comentarios en el blog:
Publicar un comentario
Puedes comentar libremente. Agradezco tu participación. Sé prudente y respetuoso al exponer tus juicios. Escribe en minúsculas. Puedes poner tu nombre o comentar como anónimo. Si no aparece tu comentario al momento, no te preocupes, es que ha pasado a moderación porque se trata de un post viejo, pero enseguida lo apruebo.